Olga Casallas, hijastra de Fernando Merchán, el vigilante del edificio Equus 66 en el que apareció muerta la menor Yuliana Samboní, rompió su silencio y aseguró que su padre se quitó la vida por la presión que sobre él ejerció el dueño de la empresa para la que trabajaba Merchán.
La joven indicó que su papá fue culpado por el empresario de la muerte de la menor y que ese hecho, así como el miedo de volver a la cárcel, llevó al celador al suicidio.
También expresó que Fernando Merchán, el hombre que a ella la educó, es inocente en el caso de la muerte de la niña y que los hermanos de Rafel Uribe Noguera, el sindicado por el crimen, mienten al asegurar que Catalina Uribe Noguera discutió con el celador en el sexto piso de la edificación.
“Mi padre no subió al sexto piso, él no deja el puesto de trabajo, en la minuta dice que sí tuvo discusión con la señora Catalina, pero en la portería”.
Casallas contó que su padre había purgado una condena de cinco años por el delito de narcotráfico y que su paso por la prisión había sido un momento muy traumático en su vida.
Además indicó que Merchán nunca había visto a Yuliana y que él no tuvo nada que ver con lo que le ocurrió a la niña y aseguró que lo único que busca es limpiar el nombre de su papá, que se vio envuelto en el crimen de la menor.
Fuente: Extra Girardot
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